viernes, 29 de febrero de 2008

sinestesia

Fernando Pessoa le debía tanto a Cesário Verde como yo le debo a Fernando Pessoa.

frases

* Detesto a Le Corbusier, como a casi todos los arquitectos.

* Muebles o inmuebles, a mí los bienes me parecen despreciables.

* Lo que ciega el presente es la noticia falsa del mañana.

* Huye de los imbéciles como de la peste.

* No soy gregario, no soy generacionista ni colegiado o asociado, y además, padezco amnesia.

* Una conclusión suele ser lo contrario a una ocurrencia.

* La generosidad auténtica es irreductible, como la soledad.

de las citas ajenas (Nicolás Gómez Dávila)

El vicio que aqueja a la derecha es el cinismo, y a la izquierda la mentira.

domingo, 24 de febrero de 2008


ramonismo

Yo no voy nunca a los entierros, tengo esa costumbre, cuenta Maruja Mallo a Fernando Huici, en una entrevista de hace ya treinta años, refiriéndose al entierro de Ramón en el cementerio de San Justo, al lado de Larra. Pero al suyo fui y vi el famoso momento en que Luisita lanzó sobre el féretro un ramo de jazmines que había traido de Buenos Aires. Era ese jazmín de cabos grandes que sólo se dan allí, con el inicio de la primavera. Recuerdo, continúa Maruja, que Edgar Neville, que quería mucho a Ramón, dijo: "Es uno de los más bellos poemas escritos en la Historia".
¡Menudo tío!, dijo José Bergamín de Ramón Gómez de la Serna.

a n e c d o t a r i o

Ramón Acín tuvo que enviarle a Buñuel, desde Teruel, un puñado de hormigas para la película Un perro andaluz, porque las hormigas de París eran muy pequeñas, según el cineasta aragonés.
Cuando Henri Matisse expuso su obra en Madrid, no vendió ni un sólo cuadro.

viernes, 22 de febrero de 2008

Voy a presentarme a las elecciones generales, porque ni soy de izquierdas ni de derechas, ni conservador ni progresista, ni joven ni viejo, ni moderado ni extremista, ni abogado ni periodista, ni licenciado ni catedrático. Voy a presentarme a las elecciones generales, porque ni soy magistrado ni fiscal, ni delincuente ni víctima, ni santo ni demonio. Voy a presentarme a las elecciones generales, porque no soy intelectual zurdo ni diestro, no soy artista de ministerio ni subvencionado, no soy administrador ni alcalde, no soy banquero ni cliente moroso. Voy a presentarme a las elecciones por que no soy patriota ni antipatriota. Voy a presentarme a las elecciones porque me gustan el teatro del absurdo, la poesía académica, los bailes de salón, las corbatas supérfluas, las promesas que a nada comprometen, las mentiras impías, la justicia igual para todos, los casamientos entre moscas y libélulas, la feria de las vanidades y el banquete de los poderosos. Voy a presentarme a las elecciones porque sé menos que Solbes y menos que Pizarro (dos lumbreras nacionales), pero siento más que ellos. Voy a presentarme a las elecciones, finalmente, porque siempre quise estar en el mejor carnaval del mundo, con la madre de los engaños por bandera, y porque, aunque pueda equivocarme, he dicho de modo audaz y claro, porque voy a presentarme a las elecciones.

miércoles, 20 de febrero de 2008

Vladimir Nabokov

Cualquiera cuya mente es lo bastante orgullosa como para no formarse en la disciplina lleva oculta, secreta, una bomba en el fondo del cerebro. Y sugiero, aunque sólo sea por diversión, que coja esa bomba particular y la deje con cautela sobre la ciudad modelo del sentido común.

Tadeusz Kantor

Todos los mayores, los ministros, los generales, los directores, los presidentes, los policías, los militares son asesinos de su infancia.

de las frases ajenas (Oscar Wilde)

Tu defecto no es saber tan poco de la vida, sino saber tanto.

de las frases que no son mías ni sé muy bien de quién son

Hoy mi reino es aquella tierra de nadie donde ya no preguntan más por uno.


Letra abierta
silaba lavada
palabra de alambre
y hambre de palabras
cascajo de un volcán
cascabel de cordillera móvil
vuelo interior de pájaro
mendigo.
La Extrañeza. El Delirio.
La Muerte
derrotada.
¿..... Y luego .....?

lunes, 18 de febrero de 2008

A las 13,57 del día 18 de febrero, como siempre solo, como siempre niño, vagabundo como siempre, les digo a los poderes y a los que les guardan las espaldas a los poderosos que por mí pueden irse todos al infierno, donde quizás ya viven, horrorizándonos, que sus guerras son estériles y sucias, como sus leyes, sus propiedades, sus gobiernos, y que Alejandro y Napoleón están muertos, y los poetas no podrán curar en esta Babilonia triste y ruidosa, a ningún mago capaz de salvar la imaginación de los niños solitarios.
¿Y qué va a ser de las piedras a las que tanto
amabas, qué va ser de los libros mudos,
qué de las fotografías con la luz del mundo?
¿Y qué va a ser de ti, Soledad, dime?
¿Qué será de los recuerdos?
De aquel dibujo de un amigo ausente,
de aquellas plumas de pájaros antiguos,
de las miradas que nunca serán vistas,
y de los hipocampos y de aquel perro
azul y amarillo, que ladraba al miedo
cuando ni la música era nuestro aliado.
¿Qué va ser de la ternura miserable
y de las cartas que el amor no lee?
¿Qué será de los recuerdos?
¿Y qué va a ser de ti, Soledad, dime?

martes, 12 de febrero de 2008

Enrique Vila-Matas

Hace muchos años que leí Historia abreviada de la literatura portátil y Suicidios ejemplares, dos obras de Enrique Vila-Matas, un escritor de escritores, un enamorado de la literatura, porque acaso la vida no es suficiente, o no es verdad, o es una impostura, un desatino cierto o incierto, o vaya usted a saber, aunque muchos fueron a saber y no aprendieron nada. A mí, como a Enrique, me atraen de manera hipnótica las islas y, en especial las Azores, a la las que nunca fuí. No se extrañen, por favor, también Toledo me gustaba más antes de verlo que después. Bueno, hablando de escribir y de escritores, cada uno tiene sus propios escenarios y sus queridos fantasmas. Yo, que en cuanto a los fantasmas, comparto su admiración y cariño hacia algunos escritores, que no voy a citar, no escribo como Enrique, ni tampoco vivo como él; yo soy más el que soy que el que escribe, y además, lo que yo quería de pequeño, no era ser torero, sino futbolista o músico de jazz. Eso sí, lo que quiero de mayor, me atrevo a aventurar que se parece mucho a lo que quiere él. En cuanto a Barcelona, un escenario común para los dos durante muchos años, resulta curioso y mágico ese encuentro y desencuentro a un tiempo, porque los lugares que Enrique frecuenta me son muy conocidos, en general, y muy queridos algunos. Viví en el Passeig de Sant Joan, me encantaba ir las tardes otoñales o las mañanas festivas al Palau Macaya, hoy abandonado a su destino; visitaba Gràcia y los cines Verdi, aunque ahora tampoco voy al cine. Miraba fotos y tomaba café en el Bauma y en el Central de la calle Girona. Iba y voy a menudo por las librerías de la ciudad, pero nunca lo vi, hasta un día como hoy, de mediados de febrero, solo, enrojecido, abotargado y desamparado, en la presentación del número dedicado a Méjico de una revista que se llama Rosa Cúbica. Luego y, después de aquellos libros primerizos, que casi no leía nadie en España, no leí nada más de Enrique, exceptuando una recopilación de artículos y referencias sobre él y su obra, libro que me dejé olvidado en algún lugar del barrio madrileño de Lavapiés, y que espero encontrar de nuevo. Y no es que no quiera leerlo por alguna razón o por alguna sinrazón, pero me gustaría mucho más tomar un café con él, a pesar de su timidez y de la mía, y hablar de Huidobro y Altazor de Vallejo y Trilce, de Pessoa y el Libro del desasosiego, de Tostói y La historia de un caballo, de Melville, de London, de Hölderlin, de Tralk. Y preguntarle, entre otras impertinencias, si habiendo tenido la posibilidad de elegir su identidad y de ser otro, hubiera elegido ser Enrique Vila-Matas.

António Lobo Antunes, tengo un hermano que se parece mucho a ti. Él no lo sabe; pero yo creo que un día va a ver por ahí una foto tuya y me va a preguntar:¿Tú conoces a ese hombre que escribe y que tiene un nombre tan bonito?. Y yo voy a responder: No, no mucho.

maneras de morir

Henri Roorda decidió suicidarse en Noviembre de 1925, pegándose un tiro, pero sabiendo, como él mismo escribió, que la musica le perdonaba.
Baudelaire y Céline adoraban a los gatos. Baudelaire fue prohibido, y Céline perseguido.
Qué extraño parecido el de Giorgio Colli con Elias Canetti.
Todos los escritores son escritores de ficción.

B A R O J A

La Ley es inexorable, como los perros: No ladran más que al que va mal vestido.

de los escritores (Rafael Sánchez Ferlosio)

Babilonios somos, no nos vuelva la tentación de levantar ninguna torre juntos. Más bien ¡dejémonos ya de una vez por imposibles los unos a los otros, como buenos hermanos!

Una mujer que puede dejar a otro por ti, también puede dejarte a ti por otro.
Ni es mérito escribir, ni es mérito dejar de hacerlo. Mérito es escribir como si fuera posible transformar el mundo, sabiendo que no es cierto.

domingo, 10 de febrero de 2008

Conocí a Dostoievski antes que a Kafka, y a Tolstói antes que al otro genial novelista ruso. Todavía, quizás por afinidades afectivas o porque "los viejos amores jamás se olvidan", tengo a Tolstói por mejor escritor que a Dostoievski, y considero a éste superior a Kafka, aun siendo como es, tan querido para mí, el escritor checo.

viernes, 8 de febrero de 2008

AUTORRETRATO

Yo soy mis fotografías.


maneras de morir

La segunda y última esposa de Stalin (Nadejda Alliluyeva) se suicidó pegándose un tiro en la casa de campo del que se autoproclamó "padre de todas las naciones del mundo".

de los escritores

Yo no detesto a ninguna clase de escritor, pues como diría Ernest Hemingway, escribir es malditamente difícil. Pero sí hay escritores que me producen un verdadero rechazo: aquellos que teniendo dinero y fama se plegan al llamado de las empresas editoriales y al reclamo mercantislista, llegando a publicitar y vender lo que ni les interesa ni les mueve ni les hace ninguna falta.
España, cada vez más, es sólo un escaparate donde no hay nada de lo que quiero y poco de lo que necesito.

lunes, 4 de febrero de 2008

NOTICIAS

A mis posibles editores quiero decirles que desisto de los derechos de autor y de cualquier otro derecho que pudiera asistirme o corresponderme en el futuro, respecto de mi obra y de las obras de NONUDRA e Ildo Tenorio. Decirles que desisto tambien de todo tipo de deber o compromiso, si es que alguno hubiera de tener para con ellos. En cuanto a la novela memorística: La verdadera historia de Don Hermético Monteiro, escrita en sólo tres semanas, en Oporto, mediado el año 2000, lo único que voy a participarles es que tuvo como eje básico y arranque argumental a quien fuera mi gran amigo y verdadero maestro: Ildo Tenorio, fallecido tras un nefasto accidente (la forma más absurda de morir, según Albert Camus), cuando apenas contaba 44 años de edad.

a n e c d o t a r i o

Dicen que Enrique Vila-Matas (el escritor que ya ha escrito todo lo que a mí me gustaría escribir) suele dedicar todos sus libros a una misma persona. Yo admiro esa fidelidad y fijación constantes en un escritor inconstante, etéreo, volandero, fragmentario, aforístico, desasosegado, genial y "portátil". Además, a mí no me parece mala idea dedicarle toda la obra a una misma persona, siempre -¡claro está!- que esa persona exista y pudiéramos encontrarla, si por un acaso decidiéramos buscarla.

de las citas propias, de las propias citas

la dificultad de no ser nadie es inmensamente mayor que la de ser alguien.

de las citas ajenas (Cioran)

La oficina, ese infierno idiotizante.